Aprovecho mi posición como profesor de Organización y Gestión de la Protección Ambiental (en el programa bilingüe) en el Ciclo de Química Ambiental para comentar que la capital danesa ha sido sede del 27 al 31 de octubre de la última reunión del IPCC. El propósito era negociar los términos del quinto informe de evaluación (AR5). El día 2 de noviembre salió publicado este informe final, que supone la mayor panorámica global del cambio climático de la historia.
Me acabo de bajar el informe AR5 de la web del IPCC http://www.ipcc.ch/report/ar5/wg1/. Tiene 1522 páginas, así que voy a tardar en leerlo. En serio, leeré el resumen para políticos para tener una idea básica.
Tiene mucho sentido que esta reunión haya tenido lugar en Copenhague, capital verde de un país líder en la lucha contra el cambio climático, que en 2020 alcanzará el compromiso de reducir el 40% de emisiones de gases de efecto invernadero respecto al anyo base 1990 y que espera en 2050 ser virtualmente independiente de los combustibles fósiles. De hecho reducirá su dependencia en un 80-85%.
Copenhague es la capital verde europea 2014. Con todo merecimiento, pues es todo un ejemplo de sostenibilidad. En el capítulo de transporte, por ejemplo, el 50% de los ciudadanos de la capital se desplazan en bicicleta. También se ven en las calles bastantes coches eléctricos y puntos de carga. Otra realidad destacable es la alta eficiencia térmica de las construcciones. Muchas poseen placas solares para calentamiento de agua. Y así podríamos seguir...
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